Podéis hacer cremas de todo tipo, pero lo más importante es que sean saludables, nutritivas y ricas. La crema de zanahoria y jengibre cumple esta premisa y además es de lo más cremosa. Para conseguir que sea muy suave no ha hecho falta añadir ni nata ni quesitos, con una cucharada de crema de cacahuete conseguimos hacer la crema mas sedosa. ¿Tu cuerpo te pide un poco? Pues en solo 30’ la tendrás lista.
La crema de zanahoria se hace con muy poco ingredientes, pero hay dos que son clave para conseguir el ligero toque thai de esta crema: la crema de cacahuete y el jengibre. La raíz de jengibre tiene un sabor muy especial al igual que sus exclusivas propiedades. Una de las que me parecen más interesantes es que ayuda a mejorar la circulación y también mantiene las defensas del organismo. Para lograr sus beneficios debemos incorporarlo más nuestras. Podéis preparar infusiones, salteado de verduras, sopas.
Un bol de esta cremas bien caliente sienta estupendamente, es de esas que te hace entrar en calor en cuestión de segundos. Como toque final le he añadido garbanzos especiado que se hacen en 10’ en el horno y le dan un toque crujiente súper rico.
Veamos qué necesitamos para hacerla:
Crema de Zanahoria y Jengibre saludable, nutritiva y riquísima para combatir el frío. Se hace en 30 MINUTOS y queda súper cremosa sin echarle ni leche ni queso.
- 500 g de zanahorias, en rodajas gruesas
- 1 patata mediana en trozos
- 1 cebolla troceada
- 4 ajos partidos grotescamente
- 1 cm de jengibre fresco en trozos
- 6 tazas de agua
- 1/4 taza de crema de cacahuete
- 1/2 cdta. de sal
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En una cazuela con un poco de aceite saltea el ajo, el jengibre fresco, la cebolla y la zanahoria durante 5’.
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Añade la patata troceada y cubre con el agua. Lleva a ebullición y una vez que rompa a hervir baja el fuego a medio. Cocina durante 20-30’ o hasta que las zanahorias estén blandas.
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Deja que la crema se enfrié un poco en la cazuela. Reserva una taza de caldo para ajustar la consistencia de la crema. Añade la crema de cacahuete (opcional) y tritura en un procesador de alimentos o con una batidora de mano. Añade más caldo del que has reservado para ajustar la consistencia de la sopa a tu gusto.
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Sirve con unos garbanzos especiados, cacahuetes, panes o un poco de perejil fresco por encima.
*Sustituye el jengibre fresco por ½ cdta. de jengibre en polvo.
*Puedes sustituir la crema de cacahuete por ¼ taza de anacardos o almendras crudas.
¿Os ha gustado esta receta? Espero vuestros comentarios y me encantaría ver el resultado. ¡Etiqueta a #shoothecook en tu foto de Instagram para que no me la pierda!
